Blogia
Noticias en línea

Francisco Javier Bautista Lara, De policía dio salto a la literatura

Francisco  Javier Bautista Lara,  De policía dio salto a la literatura

Clarissa Altamirano

Francisco  Javier Bautista Lara. De policía dio salto a la literatura una de sus pasiones desde la infancia, Mirada tierna, nunca se altera,  toma las cosas con calma  y palabras elocuentes,  aunque a primera vista pareciera  muy  frío  cuando se le  conoce mejor resulta  muy  agradable,  sentimental y compasivo.

Es un ser humanos muy  competente prestan mucha atención a los detalles. Su personalidad  tiende a dar supremacía a la razón.

En los últimos años dedicados a la literatura, transmiten su mensaje claro lucido equilibrado.  Nació el 31 de Mayo de 1960, hijo de Publio Bautista Díaz (1927 - 2009) y de María Rosa Lara Oviedo (1930 - 2005). 

Fundador de la Policía Nacional de Nicaragua en septiembre de 1979, después de participar en la lucha contra la dictadura somocista. Desempeñó diferentes cargos hasta llegar a ser Subdirector General y Comisionado General entre 2001 y 2005. Realizó estudios especializados de policía en Bulgaria, España, Taiwán, Francia y Estados Unidos.

Ha escrito diversos artículos y ensayos para diarios y revistas nacionales y centroamericanas sobre temas literarios, históricos, sociales y de seguridad pública, publicando a la fecha siete libros su última novela “Manantial” , cuyos personajes que interactúan en Manantial encontramos a Rubén Darío, al querido monseñor Lezcano, recién nombrado primer arzobispo de Nicaragua, al gran filántropo, pero incomprendido hasta el día en que se abrió su testamento, Zacarías Guerra; al padre Dubón, santo no canonizado, quien cuidó de la niñez abandonada.

También encontramos a un personaje inusual en la novela, pero frecuente en la fábula: Lobo un perro pastor belga, fiel amigo y confidente del protagonista. Este personaje encarna la virtud que ha escapado del ser humano y es también como la encarnación del misterio que envuelve a cada ser vivo, del que no se excluyen las personas.

Al final de la obra, la sociedad del siglo XXI valora, a través de las redes sociales -que son como el refinamiento de la tecnología actual- la obra del protagonista, don José Zacarías Guerra, quien fuera de la ficción dejó su patrimonio para una obra que perdura a la vuelta de un siglo. No deja de ser polémico que la sociedad actual, tan distante en muchos aspectos de aquella que nos podría parecer hasta primitiva, pueda valorar con objetividad la sensibilidad social de un personaje que se nos adelantó un siglo.

Los resultados siempre serán controversiales como la vida de quien, en su tiempo fue considerado como misántropo y gran tacaño. A continuación una breve entrevista al autor de esta bella obra para Nicaragua en Línea.

Clarissa Altamirano ¿Un escritor es innato, nace o se hace?

Francisco  Javier Bautista Lara: Uno puede sentirse motivado a escribir, pero para escribir hay que trabajar, estudiar, leer mucho, ese es el punto de partida, la puerta de entrada es la lectura constante y diversa,  y también la observación del entorno, de todo lo que nos rodea, las personas, la naturaleza, los acontecimientos para finalmente interiorizar y expresarse, como una necesidad, en un texto.

Clarissa Altamirano: ¿Ha pensado incursionar en la política?

Francisco  Javier Bautista Lara: Estuve involucrado en la lucha contra Somoza desde el Frente Sandinista, sigo siendo sandinista por convicción y tradición, soy militante de la II promoción del FSLN, una militancia histórica; actualmente no tengo un rol beligerante en la política, no me he involucrado en ningún partido político aunque conozco y me relaciono con personas de todos los partidos políticos, respeto los diferentes puntos de vista, me parece que la intolerancia no abona a fortalecer la convivencia en un país pequeño donde todos nos conocemos y hay tantas urgencias que resolver.

No he querido dedicarme a la política como una ocupación profesional, me gusta más el mundo académico, la literatura, la docencia, escribir, compartir, enseñar y aprender. El futuro dirá en dónde puedo contribuir de mejor manera.

Clarissa Altamirano: Cómo transcurrió su infancia que influencia tuvo? ¿De niño soñó con ser policía o escritor?

Francisco  Javier Bautista Lara: Fui policía por las circunstancias históricas que me tocó vivir, después del triunfo de la Revolución Sandinista me enviaron a la Policía, como parte del grupo de fundadores.  Mis intenciones eran, al concluir la secundaria en 1978 en el Instituto Pedagógico de Managua, irme a estudiar a Italia, tenía una beca por mis buenos resultados como estudiante, eso se pospuso y al final no ocurrió, me quedé aquí. Estuve en la Policía durante un poco más de 25 años hasta que el ex gobernante Bolaños, enredado en la paranoia de su propia confusión, actuando al margen de la ley, decidió violar la ley y retirarme sin que ocurrieran ninguna de las causales previstas, fue un acto desesperado de su parte que violó mis derechos humanos y profesionales, según lo confirmaron las resoluciones de la Corte Suprema de Justicia, los pronunciamientos de la comisión respectiva de la Asamblea Nacional y de otros organismos como el CENIDH. Esa decisión arbitraria me dio la oportunidad de hacer otras cosas que disfruto y realizo con libertad.

Me ha gustado escribir desde la adolescencia y también leer.  Antes publicaba en los suplementos literarios, que lamentablemente ya no existen.

Clarissa Altamirano: ¿Qué es lo que le inspira al escribir?

Francisco  Javier Bautista Lara: Me motivo cuando leo y cuando observo lo que pasa a mí alrededor. Me gusta caminar, es mi rutina cotidiana y favorita, cada tarde o cada mañana, según sea posible, unos 5 kilómetros, voy viendo las calles,  la gente y cada detalle es un aprendizaje, veo los árboles, la naturaleza, siento el viento, observo los conflictos de los peatones para cruzar la calle, la basura, el mal olor, los cauces, las cunetas, los niños en los semáforos, la gente vendiendo, entre otras cosas.

Clarissa Altamirano: ¿Cuál ha sido su influencia?

Francisco  Javier Bautista Lara: Esas son cosas difíciles de precisar, la influencia siempre es diversa y constante, conozco a escritores nuevos, que antes no había leído, que me agradan, como José Saramago y más recientemente Mo Yang, ambos son premio Nobel de Literatura, el primero de 1998 y el otro del 2012. Cuando estaba en los primeros años de secundaria leí algunos autores nicaragüenses que me gustaron, me agradó conocer lugares de Nicaragua a través de ellos y  el hablar y la cultura.  Uno es Fernando Silva, cuando leí El Comandante y De tierra y agua, otro Lisandro Chávez Alfaro, con su obra Los monos de san Telmo, y también recuerdo Bananos de Emilio Quintana.

Clarissa Altamirano: ¿Por qué se inclina más a la novela de carácter histórico?

Francisco  Javier Bautista Lara: No tengo una inclinación. La primera novela que publiqué se llama Rostros ocultos y es sobre la gente de Managua que viaja cotidianamente en buses. La segunda que escribí y no he publicado, posiblemente se llame Olvido y tampoco es histórica, la tercera que escribí, aunque es la segunda que publiqué, tiene rasgos históricos y biográficos, de fines del siglo XIX e inicios del XX, sobre un misterioso personaje que al morir dejó su herencia a los huérfanos, me ubico en el contexto histórico, político, social y cultural de la época para trasladar al lector a ese momento y comprender mejor al personaje que motiva la obra, la vida posible de José Zacarías Guerra, quien murió hace un siglo.

Clarissa Altamirano: ¿La literatura para mucho es un escape,  donde se puede plasmar la denuncia social se puede ser crítico en Nicaragua,  existe esa crítica de parte de este gremio?

Francisco  Javier Bautista Lara: La literatura es una manera de expresarse y comunicarse, no es ajena a lo que pasa en el entorno ni a lo que pasa en la vida personal de quien escribe y quien lee, tanto influyen las circunstancias, como las motivaciones y preocupaciones de los lectores y del escritor.

Sin lugar a dudas también, desde la literatura se critica, se reflexiona, se cuestiona, se vuelve para atrás y para adelante, se inventa el mundo y la sociedad, de destruye y construye, la palabra escrita es capaz de todo eso, puede dar esperanzas o desilusiones. Todo ello es necesario y es parte de la naturaleza de la literatura, a mí me gusta trasladar un mensaje positivo, algo que pueda ayudar a otros, además de divertir o distraer.

Clarissa Altamirano: ¿Considera qué se está haciendo literatura de calidad,  los jóvenes escritores o se están quedando en la superficialidad?

Francisco  Javier Bautista Lara: Hay de todo, siempre ha habido de todo, va quedando lo que es mejor o lo que gusta más. En cada época surgen voces que hablan y escriben, que interpretan y comunican, que enseñan y divierten.  Falta apoyo para publicar, hay personas que escriben y no tienen forma de compartir. Ahora las opciones electrónicas son abundantes, es una manera creciente de publicar aunque el libro impreso no ha cedido su lugar.

Clarissa Altamirano: Los escritores,  en cada época han desempeñado un papel importante ¿qué papel está desempeñando los escritores en Nicaragua en actualidad?

Francisco  Javier Bautista Lara: No sabría decirlo, uno se da cuenta de eso después. No puedo saber qué papel estoy desempeñando hoy, por ejemplo, simplemente escribo y comparto lo que escribo, doy charlas a estudiantes en colegios y universidades, publico en los diarios, dialogo con algunos, y allí va quedando lo que uno dice, ojala sea útil, lo hago por necesidad y espero contribuir en algo que no sé precisamente.  Uno nunca sabe las consecuencias y efectos que lo que escribe puede tener en cada persona, quisiera que mis líneas ayuden a esa persona a encontrar respuestas y motivaciones en algo que no entiendo y que solo el lector o lectora sabrá valorar.

Clarissa Altamirano: A lo largo estos años ¿qué lo más importante, qué ha realizado en su vida?

Francisco  Javier Bautista Lara: Mi vida no ha terminado.  No sé qué es lo más importante, solo sé lo que más me ha gustado y motivado, por ejemplo, mi participación en la lucha con la dictadura, desde el Sandinismo, para mi está llena de entusiasmo y compromiso, de mística, es una etapa histórica inolvidable.  También los primeros años en la fundación de la Policía son de gran valor personal.

Clarissa Altamirano:¿Qué proyecto le quedan por hacer?

Francisco  Javier Bautista Lara: Sigo escribiendo. En el corto plazo espero poder publicar la otra novela que ha quedado pendiente, también hay un libro que titularé OTROS INCONCLUSOS, como una continuación al anterior INCONCLUSOS, que es una propuesta de narración breve de ficción que pretende mostrar que una historia puede ser contada desde diversos puntos de vista y es un inconcluso. Hay otras cosas sobre las que trabajo e irán saliendo poco a poco a medida que el  tiempo y los recursos lo permitan, pero principalmente que tenga la fuerza personal para impulsarlos.

Clarissa Altamirano:¿Cómo se definiría usted?

Francisco  Javier Bautista Lara: No sé en qué sentido. Uno se puede definir o ubicar en dependencia del criterio de clasificación, me defino como un ciudadano nicaragüense, en primer lugar; escritor, especialista en seguridad ciudadana, que me gustan las cosas sencillas y cotidianas, que no me gusta la extravagancia ni los trajes ni las corbatas ni las tarimas, me agrada caminar y ver la naturaleza, cada mañana veo las estrellas y siento el aire fresco, me gusta comer frutas, disfruto el café negro de la mañana, me agrada conversar con los niños y percibir su inocencia, me gusta la belleza y el encanto de la música, la pintura y el arte, me  gustan las mujeres sencillas, dulces e inteligentes que aprecio en la distancia …

Clarissa Altamirano: Hasta ahora ¿cuál considera su obra maestra?

Francisco  Javier Bautista Lara: No me gusta hablar de obra maestra, creo que eso casi no existe, depende de lo que dicen otros según su propio criterio. No lo sé y no me interesa.  Los libros que he publicado, cada uno para mi tiene su encanto, por las circunstancias en que se escribió, por las historias que cuenta, por lo que aprendí al escribirlo, por el impacto que algunas personas han tenido, por los comentarios recibidos, por el agrado que he percibido. El libro más leído y publicado es la novela Rostros ocultos y el otro Inconclusos, ahora la novela Manantial también,  los ensayos Entre autores y personajes han tenido alguna utilidad para promover la lectura entre los jóvenes.

Clarissa Altamirano:¿Durante su tránsito por la policía nacional cuál fue su mayor logro?

Francisco  Javier Bautista Lara: Fui subdirector general y comisionado general. Lo primero es que participé en la fundación de la Policía en 1979, después, a fines de la década del noventa, coordiné el diagnóstico institucional y la formulación del primer plan estratégico de desarrollo que permitió iniciar un proceso de fortalecimiento institucional, dirigí este proceso durante varios años y  hubo cambios importantes. Ocupé diversas posiciones, comencé en la policía de Chontales, fui jefe de seguridad pública, jefe de personal, jefe de investigaciones económicas, director de la Academia de Policía, jefe de investigaciones criminales.

Clarissa Altamirano:¿Qué es lo que le hubiera gustado hacer y no pudo hacer?

Francisco  Javier Bautista Lara: Avanzar en el plan de desarrollo institucional y principalmente que se respetara el marco legal que, en aquel entonces, el ex gobernante conservador violó por su actuación impulsiva.

Estudié economía, hice una especialidad en políticas macroeconómicas, estudié administración, desde la secundaria siempre me gustaron los números, la matemática, la física y la química, las disfrutaba, a veces leo algo de eso, sin embargo, me quedé con la literatura, aunque las matemáticas a uno le dan un sentido lógico, me hubiera gustado avanzar más en eso pero ya no será posible.

Clarissa Altamirano: ¿Por qué el gremio de escritores es tan crítico entre ellos mismo que llegan a ser crueles?

Francisco  Javier Bautista Lara: No sé. Talvez, como en todos los gremios hay envidias y resentimientos, contradicciones propias entre las personas, incomprensiones. Prefiero ser respetuoso de los otros y otras, leo lo que puedo y trato de entender con tolerancia sus puntos de vista, trato de aprender de todos.

Clarissa Altamirano:¿Cuál es su pasatiempo favorito?

Francisco  Javier Bautista Lara: Me gusta leer, es una condición necesaria para escribir. Me gusta caminar, observar la naturaleza. Me gusta tener la oportunidad de estar cerca de mis hijos.

Clarissa Altamirano:¿Quién determino su carácter su padre o su madre?

Francisco  Javier Bautista Lara: Ambos, eso siempre es así. Los padres influyen, pero también los hermanos mayores, los compañeros de la escuela, los amigos del vecindario, los otros parientes, recuerdo a mi abuelita materna que murió cuando tenía 8 años, y también a un tío, hermano de mi mamá que durante mi niñez estuvo muy cerca.  Las personas te dejan afecto, te transmiten afecto, valores, puntos de vista, cosas buenas y malas. Te enseñan la forma que comen y lo que comen y a veces tenemos que desaprender cuestiones de forma y nos vamos quedando con el fondo que a fin de cuentas fue la compañía, un gesto de cariño, el sacrificio que hicieron, la dedicación, la esencia misma de cualquier relación. En la vida uno no recuerda todo, recuerda instantes, los conserva, duraron poco quizás, pero tiene una presencia constante y profunda.

Mi familia era numerosa, soy el cuarto de diez hermanos, tuvimos muchas dificultades económicas, mi padre y mi madre son de Chinandega, cuando vinieron a Managua, mi mamá venía embarazada de mí que nací circunstancialmente en Managua, en el Barrio Cristo del Rosario. Mi padre era músico, tocaba violín y viola, aprendí a apreciar la música clásica, fue fundador de la orquesta sinfónica de Nicaragua, era también contador, mi madre era ama de casa, una mujer dedicada a la casa y siempre presente en nuestras necesidades, siempre al lado de uno con sus palabras y su cariño.

Clarissa Altamirano:¿Cuál es su escritor favorito?

Francisco  Javier Bautista Lara: No sabría contestar. De los nicaragüenses siempre vuelvo a Darío, a Carlos Martínez Rivas, por ejemplo. También a Cervantes, Gabriel García Márquez, y muchos otros.  De autores que voy conociendo siempre busco dos o tres obras para conocerlos, busco novelas, cuentos y poemas, algunos ensayos que me ayuden a comprender la historia, el comportamiento humano y los fenómenos contemporáneos que nos sorprenden y a veces, por la rapidez con que ocurren, no nos da tiempo para pensar.

7 comentarios

Norlan Manga -

¿Cual es el sentido de cosmovisión de los personajes de su novela encuentro?

Efrain Luquez Montiel. -

Felicidades Francisco, Dios primero y bendiciones por tus logros y trayectoria.

Erick Álvarez Krüger -

Indudablemente que leer a Francisco Bautista es introducirnos en sus escritos, es vivir momento a momento determinado personaje con el que sentimos mayor afinidad, en algunos casos, pero en general es la amenidad, la descripción, el diálogo y la versatilidad lo que hace que nos interesemos en el desarrollo de la trama; son escritos que demuestran optimismo, sinceridad, honestidad, valentía y sobre todo una necesidad de ir urgando más a medida que uno desarrolla la lectura. Felicidades hermano esperando seguir leyendo tus publicaciones que han sido un éxito. Bendiciones siempre. Un abrazo

Aura María Cubillo Medrano -

Efectivamente su personalidad tiende a dar supremacía a la razón porque los nacidos el 31 de mayo se relacionan con el día de la Agudeza. Es una gran satisfacción tener amigos como usted, que con su abnegado esfuerzo, sacrificio y constancia han perfeccionado su camino a la Literatura, sobresaliendo siempre con un gran espíritu emprendedor. Al escucharlo hablar me recordó al Poeta Fernando Antonio Silva Espinoza, que llegó a la poesía a través de la serenidad de la naturaleza, mientras observaba un árbol en el río, le llegaron a la memoria lo que serían sus primeros versos” Un hueco en un árbol, a un lado se pega el ojo y al otro lado se pega el rio” Muchas Felicidades Comisionado General Bautista.

Oscar Humberto Urey Mayorga -

Leer de este personaje es como un mito o una leyenda, su historia es grande, procede de una familia noble, honrada, trabajadora, de grandes principios morales con los cuales fue educado,humildes de corazón y economicos, pero la vida lo llevo a formar parte del frente sandinista, que lo envio a cumplir a ser parte de los fundadores de la Polisia Nacional, aunque por arbitrariedades y revanchas de politicos egoistas y de negro corazón, lo alejaron de los cuadros de la Policia, pero siendo Francisco una persona de principios acepto, su retiro y se dedicó a lo que tanto le gusta como lo qeu el siempre ha sido EL POETA Y ESCRITOR, del cual muchos nos hemos gozado y deleitado de sus sentimiwntos, un abrazo hermano Que Dios te siga bendiciendo.

Marlon Cornavaca -

Felicidades Francisco, amigo, hermano, compañero, el mejor Jefe de la POlicia, que hubieramos tenido de no ser por Enrique Bolaños, pero lo bueno que buscaste como todos la Diversificacion, para seguir adelante, a todos nos toco en su momento, despues de los noventa muchos hicimos de todo para seguir adelante con nuestras vidas, aunque es lamentable la situacion actual, porque veo de diputados a las personas que nos toco andar buscando en la montaña, como el caso de Esteman Fagot y Broklin Rivera, amigos de los diputados sandinista y de la presidencia y nosotros solo viendo desde lejos,pero a veces Dios es el define nuestros caminos, pero si tu algun dia decides ingresar en la politica, ten por seguro que tendras mi apoyo incondicional, adelante Francisco, tenemos familias por las cuales velar y proteger y a la unica forma de hacerlo, es seguir siempre para adelante, Un saludo especial Francisco, se te quiere y se te aprecia mucho.

Lucía Orellana Cofré -

He tenido la suerte de conocer a Francisco Javier Bautista Lara, y como el lo dijo en su momento, "en la brevedad de un encuentro literario" en México,y allí pude apreciar la simplicidad de Francisco, con su mirada que pareciera que siempre sonríe, con una amabilidad de pocos, de una inteligencia maravillosa, teniendo siempre
una respuesta oportuna, cuando han pasado varios años de aquel encuentro, sigo aprendiendo de él, sigo admirándolo en su calidad literaria, y sigo contando con su aprecio incondicional, desde este Sur Chileno, de paisajes variados, en donde el verde y azul se conjugan con olores a magnolios y la danza de los peces, y el rugir de sus volcanes, le saludo y abrazo a mi amigo FRANCISCO.